Superando la «saudade»
Hay palabras en algunos idiomas que son difíciles de traducir, algunas incluso imposibles. Una de estas palabras es «saudade», que se utiliza en portugués y gallego y se encuentra en el diccionario de la RAE tal cual. Saudade se define como «Soledad, nostalgia, añoranza», normalmente amplificada por la distancia.
En estos casi 9 meses que llevo por Dublín he tenido este sentimiento más de una vez. Por muy bien que esté por aquí en la mayoría de los aspectos siempre llega un momento en el que echo de menos a familia, amigos y en general la vida que tenía en Zaragoza. Una vida que no sé si volverá o no, en estos momentos no lo tengo claro.
Una vez que uno sale fuera, hay que intentar disfrutar de la experiencia lo máximo posible y pensar lo justo en lo que se deja atrás. Es cierto que conocer otro país enriquece. Irlanda, con sus luces y sus sombras, es un país que merece la pena al menos para visitar y conocer su cultura, sus paisajes y su gente. ¿Merece la pena vivir aquí? Depende.
Hay días que me siento muy a gusto por aquí. Otros días (cada vez menos) cogería un avión y me iría a casa… O ahora en invierno me iría a un sitio cálido. Bueno, eso creo que lo haré en breve 🙂 Viajar es uno de mis métodos anti-saudade preferidos, así como recibir visitas de vez en cuando como una que tengo para esta semana.
Entre la cada vez más numerosa colonia española y de otros países en Irlanda creo que existe la sensación de estar en este país «de paso». Mucha gente viene por aquí un tiempo y luego vuelve a casa o se va a otro sitio. Este sentimiento está en sintonía con una de las características típicas de los irlandeses: Son un pueblo de emigrantes.
Mucha gente tampoco soporta el tiempo aquí. No hace excesivo frío en invierno, raramente nieva, pero el viento y la lluvia resultan bastante cansinos. Eso sí, el tiempo variable que hay por aquí hace que se vean bastantes de estos en cualquier época del año…
… Aún no he podido comprobar si al final del arcoiris se encuentra un Leprechaun con su olla de monedas de oro, pero lo seguiré intentando 🙂